Las carreteras alpinas cerca de Gap, en el sureste de
Francia, supusieron un duro desafío en la reanudación de la prueba inaugural
del Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA a la luz del día. Las condiciones
eran mixtas, con parches de hielo en Saint-Maurice - Aubessagne que hacían que
los Winter i*Cept SR20 con clavos de Hankook fueran la elección favorita,
mientras que las carreteras secas en La Bréole - Selonnet daban la ventaja a
los Ventus Z215 superblandos. El paso previsto por Saint-Léger-les-Mélèzes - La
Bâtie-Neuve se canceló debido a un incidente médico que afectó a un espectador.
A pesar de un inicio cauteloso en el TC4, donde Kalle
Rovanperä marcó el ritmo, el tiempo de Evans fue suficiente para arrebatarle el
liderato a Neuville, líder durante la noche, aventajando al belga en 2,8
segundos.
Sin embargo, Sébastien Ogier se convirtió en el rival más
cercano de Evans. Las esperanzas de Neuville se desvanecieron en el siguiente
tramo cuando no calculó bien una cerrada horquilla cuesta abajo, derrapando y
dañando la suspensión trasera izquierda de su Hyundai i20 N Rally1. Ogier y Ott
Tänak también sufrieron sustos en el mismo tramo.
«Creo que pagamos el precio de no tener suficiente
experiencia con el neumático en seco», reflexionó Neuville. «Me sentía estable,
pero de repente perdí los frenos, vi la zanja y la parte trasera desapareció».
Ogier, nueve veces ganador del Rallye de Montecarlo, fue más
rápido que Evans en ambos tramos, pero sigue a 1,5 segundos tras perder unos 20
segundos en una excursión fuera de la carretera el jueves por la noche.
Sobrevivió a otro susto en el TC6 cuando estuvo a punto de caer en una zanja.
«Es muy difícil», admitió Evans. «Ha salido el sol, y en
muchos sitios donde el equipo de tierra marca 'helado', pero cuando entras y
sales de la sombra es difícil confiar en la información».
Adrien Fourmaux protagonizó una actuación inspirada,
logrando su primera victoria de tramo para Hyundai en el TC6. La velocidad del
francés le llevó de la quinta a la tercera posición de la general, y se quedó a
sólo 6,2 segundos de Evans en el ecuador de la jornada. Grégoire Munster, del
equipo M-Sport Ford, también deslumbró con dos segundos mejores tiempos consecutivos,
subiendo de la séptima a la cuarta posición gracias a que su estrategia de
neumáticos, una mezcla de superblandos, de invierno y con clavos, dio sus
frutos.
La última especial del bucle también fue dramática para
Tänak, que sufrió daños en la parte trasera de su Hyundai tras patinar. El
estonio cedió unos 15 segundos, pero sigue en liza, a sólo medio segundo de
Fourmaux, quinto en la general.
Rovanperä le pisaba los talones a Tänak, a sólo una décima
de segundo. Takamoto Katsuta, Sami Pajari y Neuville, que se recuperaba,
completaron los nueve primeros, mientras Nikolay Gryazin lideraba el Rally2 en décima
posición.