El campeonato de Neuville y su copiloto Martijn Wydaghe se
aseguró de forma dramática a primera hora del domingo, cuando su compañero de
equipo Ott Tänak, el único piloto que podía quitar el título estrelló su
Hyundai i20 N Rally1 HYBRID y perdió el liderato del rallye en el primer tramo
del día. Con un colchón de 25 puntos de cara al final de temporada, Neuville
tenía el título asegurado a falta de cuatro tramos.
«Para ser sincero, me siento genial, hemos trabajado mucho
para esto», dijo Neuville, que lidera el campeonato desde su victoria en la
primera prueba en el Rallye de Montecarlo.
«No tengo palabras, pero quiero dar las gracias a todos los
que han participado, que han luchado por nosotros y también a todo el equipo.
Estuvimos muchas veces muy cerca; siempre lo damos todo, pero este año hemos
sido recompensados por ello.»
El drama puso el broche final en una semana de altibajos para
el belga, que remontó desde la 15ª posición tras un fallo en el turbocompresor
el viernes para terminar sexto en la general. Su histórica victoria es la
primera no sólo para él y Wydaeghe, sino también para su país natal, Bélgica, y
para el equipo Hyundai Motorsport después de una década en el WRC.
Mientras Neuville saboreaba su esperado triunfo, el
accidente de Tänak dio un cruel giro a las aspiraciones de Hyundai al título de
constructores. La marca coreana llegaba con ventaja a la última jornada, pero
el péndulo volvió a inclinarse del lado de Toyota tras un tenso enfrentamiento
en el Wolf Power Stage. Sébastien Ogier, Elfyn Evans y Takamoto Katsuta
ofrecieron actuaciones decisivas cuando más importaba, ayudando a la marca
Toyota a hacerse con su octavo título de constructores del WRC por un estrechísimo
margen de tres puntos, el más ajustado desde que Lancia se hizo con la corona
por dos puntos en 1983.
Evans disfrutó de una doble celebración, heredando la
victoria del rallye tras la retirada de Tänak y convirtiéndose en el sexto
ganador diferente en una temporada altamente competitiva. El triunfo del galés
también le aseguró el segundo puesto en el campeonato de pilotos, un hito
agridulce que ha logrado por cuarta vez.
«No tenía muy buena pinta en un momento dado, pero estamos
muy contentos con el resultado y por el equipo», dijo. «Gracias también a mis
compañeros, han hecho un gran trabajo. Lamentamos no haber podido conseguir el
campeonato de pilotos, pero lo volveremos a intentar el año que viene».
Ogier completó el doblete de Toyota, terminando a 1 minuto y
27,3 segundos de su compañero de equipo. El rallye del ocho veces campeón se
vio empañado por un costoso cambio de ruedas el viernes que le bajó de la lucha
por la victoria, pero su pilotaje de recuperación aseguró puntos vitales para
Toyota en su lucha por el título.
Adrien Fourmaux puso el broche de oro a su temporada
completando el podio con su M-Sport Ford Puma Rally HYBRID. La regularidad del
francés le ha valido cinco podios en 2024 y el quinto puesto en el campeonato
de pilotos, su mejor temporada hasta la fecha.
Fourmaux llegó a la meta sólo 7,1 segundos por delante de
Katsuta, de Toyota, que deleitó al público local al terminar cuarto, mientras
que Grégoire Munster completó los cinco primeros puestos con otro coche de M-Sport.
En WRC2, Nikolay Gryazin logró una dominante victoria de
categoría y un impresionante séptimo puesto en la general, pero no fue
suficiente para impedir que Sami Pajari se proclamara campeón. El segundo
puesto del finlandés en Japón le aseguró los títulos de WRC2 y WRC2 Challenger,
culminando un año extraordinario para la estrella emergente y su copiloto Enni
Mälkönen.
El Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA está preparado
para ofrecer más emoción en 2025 con un calendario ampliado que incluye pruebas
totalmente nuevas en Arabia Saudí, Paraguay y España. La acción se reanudará
con el Rallye de Montecarlo, que se celebrará del 23 al 26 de enero.