El galés, subcampeón de la batalla por el Campeonato del
Mundo de Rallyes de la FIA el año pasado, dejó claras sus intenciones de
convertirse en el protagonista del primer rallye de 2024 al terminar la corta
etapa inaugural con una ventaja de 15,1 segundos sobre Thierry Neuville.
Evans, que pilotaba un Toyota GR Yaris, ganó la especial de
21,01 km entre Thoard y Saint-Geniez por 5,2 segundos. Luego añadió otros 6,8
segundos a su liderato al encabezar la clasificación del siguiente tramo de
25,19 km entre Bayons y Bréziers.
Las condiciones predominantemente secas ofrecieron niveles
relativamente altos de adherencia en comparación con años anteriores para el
bucle nocturno. Tras una deslumbrante ceremonia de inicio en la Plaza del
Casino de Mónaco, Su Alteza el Príncipe de Mónaco dio la bandera de salida a
los coches de cabeza.
"En el primer tramo, tuvimos una sensación bastante
buena", dijo Evans. "Parecía que teníamos una pasada limpia, pero la
segunda fue un poco más complicada, y había mucho más que hacer con las
condiciones y el asfalto brillante.
"El objetivo, más que nada, era pasar limpiamente. Por
supuesto, estoy contento, pero es sólo el principio".
Neuville se preocupó por el sobrecalentamiento de sus
neumáticos en la primera especial, pero superó a Ott Tänak en la siguiente y se
hizo con la segunda posición, mientras su compañero de equipo estonio sufría un
problema de mapeo que hacía que el acelerador de su Hyundai i20 N se atascara.
El piloto belga reveló más tarde que él también se había encontrado con un
problema similar, al igual que Andreas Mikkelsen en el tercer coche de los
constructores coreanos.
"Parece que mis compañeros de equipo tienen problemas
similares", confirmó Neuville. "Vamos a trabajar en ello: los chicos
saben qué hacer y cuál es el problema".
Tänak describió el problema diciendo: "Cuando estamos
levantando, es gas a fondo".
Sébastien Ogier ha conseguido meter a dos Toyota entre los
tres primeros, aunque se ha quedado a 21,6 segundos de Evans. La cuarta
posición en el orden de salida, frente a la quinta de Evans, supuso una
desventaja para el nueve veces ganador del Rallye de Montecarlo, que se vio
perjudicado por las condiciones más sucias de la carretera, provocadas por los recortes
en las curvas.
Un frustrado Tänak terminó la tarde 1,2 segundos por detrás,
mientras que Adrien Fourmaux, la estrella de M-Sport Ford, realizó un
impresionante pilotaje a pesar de su falta de experiencia regular en Rally1. En
quinta posición y a 39.0 segundos de la cabeza, Fourmaux se situó por delante
de Takamoto Katsuta y Grégoire Munster, mientras que Mikkelsen ocupó la octava
plaza como resultado de sus problemas con los mapas.
Una de las actuaciones estelares fue la del español Pepe
López, noveno en la general y liderato de la categoría WRC2 a pesar de pilotar
un Škoda Fabia RS Rally2 con su nuevo copiloto David Vázquez a su lado. Ganó
los dos tramos y aventajó a Nikolay Gryazin en 14,2 segundos.
La acción se reanuda el viernes con seis tramos cerca de la
ciudad anfitriona de Gap. Dos bucles de tres tramos que sumarán más de 105 km
de competitividad.