PILOTO ESTRELLA
Ott Tänak mantuvo su récord de victorias al 100% en suelo chileno pero, en
última instancia, fue la estrategia, y no sólo la velocidad, lo que le valió al
estonio la 19ª victoria de su carrera.
Tänak y su equipo M-Sport Ford hicieron dos apuestas
fundamentales con los neumáticos, la primera de ellas el viernes por la tarde,
cuando Tänak fue el único piloto de cabeza que eligió un paquete de neumáticos
compuesto exclusivamente por gomas Pirelli blandas. Conocido por su rendimiento
superior pero su vida útil más corta, se puso líder del rallye con una ventaja
de 4,2 segundos al final del día.
Los tramos del sábado fueron mucho más largos, revirados y
abrasivos que los del viernes. Y mientras los rivales de Tänak se inclinaban
por la opción de compuesto blando de Pirelli para el bucle matinal, la decisión
del estonio de llevar cuatro neumáticos duros a bordo marcó un mundo de
diferencia.
Sus rivales Teemu Suninen, Elfyn Evans y Kalle Rovanperä se
quedaron sin gomas y perdieron tiempo, mientras que Tänak aprovechó la
situación y amplió su liderato a casi un minuto.
TRAMO MÁS MEMORABLE
La primera pasada del sábado por María de las Cruces deparó acción a raudales,
ya que los pilotos de Toyota Gazoo Racing Evans y Takamoto Katsuta, además del
piloto privado de M-Sport Alberto Heller, se arrastraron por la meta volante
con las gomas de sus coches destrozadas.
Más abajo en el orden, Bruno Bulacia y Fabrizio Zaldivar se
enfrentaron a problemas de neumáticos similares, mientras que el aspirante al
WRC2 Martin Scuncio volcó su Škoda Fabia RS Rallye2 a la vista de las cámaras
en directo de Rally.TV.
Este fue también el tramo en el que Tänak se afianzó en lo
más alto de la clasificación, superando a Suninen, su más inmediato perseguidor
en ese momento, por 15,7 segundos.
LA GRAN SORPRESA
A media mañana del domingo, nadie esperaba que, en cuestión de horas, Toyota
celebrara su tercer título consecutivo de constructores.
La marca japonesa llegó a Chile necesitando sumar 13 puntos más
que Hyundai para ganar el título a falta de dos rallyes, con los pilotos del
i20 N Suninen y Thierry Neuville camino de un doble podio, las posibilidades de
Toyota parecían cada vez más escasas.
Pero todo cambió en el penúltimo tramo, cuando Suninen, que
disputaba sólo su tercera prueba con el Rally1, chocó contra un tocón de árbol
que obligó a su Hyundai a retirarse con la dirección rota.
Aunque su abandono aupó a su compañero de equipo Neuville a
la segunda posición de la general, también ascendió a Evans y Rovanperä a la
tercera y cuarta plaza. Sus resultados, combinados con el primer y segundo
puesto en el tramo de puntos extra Wolf Power Stage, fueron suficientes para
que Toyota se proclamara campeona.
NO TE LO VAS A CREER
Si alguna vez hubiera una lista de cosas que no puedes olvidar en tu debut en
el WRC de alto nivel, las notas estarían en lo más alto. Por desgracia para el
copiloto de Grégoire Munster, Louis Louka, eso es exactamente lo que ocurrió el
viernes por la mañana.
Cuando Louka se dio cuenta de que se había dejado la
documentación en la habitación del hotel, Munster y él ya estaban en camino
hacia el primer tramo del día. El personal de M-Sport Ford envió fotografías de
las notas a través de mensajes de texto y Louka, sorprendentemente, las leyó
desde su teléfono móvil.
NÚMERO DEL RALLYE 31.
El número de puntos que separan ahora a Kalle Rovanperä y Elfyn Evans en la
clasificación de pilotos a falta de dos pruebas.
Rovanperä podría convertirse en bicampeón del WRC a finales
de este mes si sale del Rallye de Europa Central (26 - 29 de octubre) con una
ventaja de 30 puntos aún intacta.