El francés, que compite a tiempo parcial, logró una justa ventaja de 2,5 segundos sobre su compañero de equipo Kalle Rovanperä. El equipo de constructores japoneses, que copó los cuatro primeros puestos en 2022, demostró que no había perdido ni un ápice de su dominio en los duros tramos de Kenia.
Ogier ganó la apretada y revirada primera especial de Loldia y amplió su ventaja a dos dígitos con un tiempo entre los dos primeros en Geothermal. Sin embargo, sus esfuerzos se fueron al traste en el rapidísimo tramo de Kedong, cuando un fallo en la unidad híbrida le costó casi 10 segundos y permitió a Rovanperä volver a la lucha.
"Me quedé sin híbrido durante todo el tramo", reveló Ogier.
El ritmo de Rovanperä fue aún más impresionante por el hecho de que tuvo que abrir carretera, trazar una línea limpia en la superficie arenosa y dejar más agarre para los que venían por detrás.
Elfyn Evans completó el podio de Toyota a 17 segundos. La cautela del galés era evidente: "Ya se han arrancado bastantes piedras grandes y está bastante blando en algunas partes. Sabía que no estaba tomando suficientes riesgos", dijo.
A sólo 1,7 segundos y en cuarta posición de la general se situó Thierry Neuville, uno de los muchos pilotos que sintieron la potencia de Kenia. Tanto él como su compañero en el i20 N, Esapekka Lappi, bajaron el tiempo con los neumáticos dañados, al igual que Ott Tänak, que se detuvo para cambiar una rueda de su M-Sport Ford Puma en Kedong.
Takamoto Katsuta dañó un brazo de dirección de su GR Yaris y se vio obligado a realizar reparaciones en carretera antes del final de la mañana. Se quedó a 7,9 segundos de Neuville y a 12,0 de Lappi, ganador en Geothermal.
Los ajustes de ritmo previos al rallye no favorecieron a Dani Sordo, sino que hicieron que el de Hyundai pilotara con demasiada cautela en algunos tramos de alta velocidad. Sordo, que ya tenía una penalización de 10 segundos por arrancar en la superespecial del jueves, fue séptimo.
Pierre-Louis Loubet se vio afectado por lo que describió como un problema de "reglajes" que dejó a su Puma sin potencia en la primera jornada. Se recuperó y se mantuvo octavo por delante de su compañero de equipo Tänak, cuyo cambio de ruedas en el TC4 le costó alrededor de dos minutos.
Oliver Solberg, que no puntúa para el WRC2 esta semana, completó el top 10 con su Škoda Fabia Rally2 Evo.
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