El francés, a los mandos de un Ford Fiesta Rally2 preparado por M-Sport, superó al líder Sami Pajari en el segundo tramo de la mañana y mantuvo su liderato durante el resto del día, llegando a la parada nocturna de Olbia con una ventaja de 25,7 segundos a pesar de sufrir un pequeño problema técnico en el último tramo.
Con Pajari descartado por los daños sufridos en la suspensión trasera en una colisión con una piedra al borde de la carretera, Andreas Mikkelsen era el rival más cercano de Fourmaux. A tan sólo 0,1 segundos del liderato en un momento de la mañana, el francés acabó desbancándole en las condiciones de meteorología húmeda del sábado por la tarde.
"Ha sido un día muy complicado para nosotros y para el coche, así que estoy contento de estar aquí", dijo Fourmaux.