El piloto de Toyota Gazoo Racing fue relegado del segundo puesto por Thierry Neuville en el Wolf Power Stage, perdiendo la posición por sólo cuatro décimas de segundo después de pilotar con un brazo de suspensión doblado en su GR Yaris Rally1 durante todo el último día.
Viendo la parte positiva de la prueba, Evans llegó a León a 12 puntos del liderato del campeonato. Se marcha precisamente en la misma posición, con la única diferencia de que ahora está por detrás de Sébastien Ogier y no de Ott Tänak, de M-Sport Ford.
"Creo que lo estamos consiguiendo; nos estamos moviendo en la dirección correcta con el coche, con mi pilotaje y con la puesta a punto", dijo Evans. "Las cosas están mejorando y estamos encontrando algo de consistencia, lo que es bueno.
"Es frustrante perder el segundo puesto, pero arrastrábamos el problema del brazo de suspensión doblado. Lo tuvimos cerca del final de Otates y la reparación que hicimos significó que realmente no podíamos atacar los tramos tanto como queríamos o necesitábamos, para mantener la posición. Todo está abierto en el campeonato, lo cual es bueno".
El director del equipo, Jari-Matti Latvala, elogió el espíritu de lucha del galés y también alabó el trabajo que han hecho sus ingenieros para mejorar la competitividad del coche en las duras pruebas de tierra.
Y añadió: "Hubo un momento en el que me sentí un poco decepcionado porque estuvimos muy cerca de conseguir el doblete. Pero al final, Elfyn luchó duro e hizo lo que pudo con todo lo que estaba pasando.
"Podías ver en su cara que tenía ese espíritu de lucha y, aunque Thierry era un poco más rápido, conseguimos el tercero con él y la victoria con Séb [Ogier]. Eso demostró que nuestros ingenieros de desarrollo han hecho un trabajo increíble para que nuestro coche vuelva a estar a la altura en este tipo de rallyes duros, calurosos y de tierra".
De cara a Croacia y a la cuarta prueba, Evans terminó segundo en 2021, pero el año pasado en Zagreb fue quinto.
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