Marcus Grönholm viajó a Nueva Zelanda para la undécima prueba, enzarzado en una reñida batalla por el campeonato con Sébastien Loeb: Grönholm con cuatro victorias, Loeb con cinco.
En su mente, el finlandés ya había decidido colgar el casco a final de año, pero para hacerlo con un tercer título, tenía que vencer a Loeb.
La batalla se libró de un lado a otro. Antes del último tramo para espectadores, el marcador era de 8:8 victorias de tramo, con Grönholm por delante en la general por sólo 0,7 segundos.
Loeb se adjudicó su novena victoria de tramo en los cortos 3,14 km de Mystery Creek. Pero no fue suficiente. Grönholm ganó el Rallye de Nueva Zelanda con un margen de 0,3 segundos.
Había sido el resultado más ajustado en la historia del WRC, ya que sólo en el Safari Rallye de 1973 y en el de Costa de Marfil de 1985 los dos primeros terminaron con el mismo crono, pero entonces los tiempos se calculaban en minutos completos.
Este artículo es un extracto de "WRC 50, The Story of the World Rallyes Championship 1973-2022", escrito por Markus Stier. Puedes conseguir tú copia aquí.
Foto de portada: © McKlein