El piloto de 21 años de Toyota terminó la prueba griega de la semana pasada en la 15ª posición de la general, trayendo a casa sólo cuatro puntos que salvó en el Wolf Power Stage. Su ventaja al frente de la tabla se ha reducido a 53 puntos.
Si Rovanperä puede aumentar esa ventaja en ocho puntos, o siete, si gana el rallye, en Auckland a finales de este mes (del 29 de septiembre al 2 de octubre), se coronará como el ganador más joven del título del WRC. Y ahí es donde están sus pensamientos ahora.
"Ha sido un fin de semana muy duro", dijo. "Desde el principio, no estaba intuyendo el coche, desde el shakedown. Es duro, pero lo bueno es que hemos cogido algunos puntos del Power Stage y eso ayuda."