El francés aprovechó los conocimientos locales adquiridos al competir en el campeonato nacional de Bélgica para llevarse los honores por 3,1 segundos con su Citroën C3 Rally2.
Lefebvre se colocó en cabeza en la segunda etapa del viernes y se mantuvo en esa posición durante todo el rallye. Se vio amenazado por el líder del campeonato, Andreas Mikkelsen, en la primera especial del sábado, pero rápidamente subió el ritmo y llegó a la última etapa con una ventaja de 25,7 segundos.
Un pilotaje excelente en los cuatro últimos tramos sobre asfalto fue todo lo que Lefebvre necesitó: su ventaja se mantuvo intacta, y también terminó sexto de la clasificación general.
"Ha pasado mucho tiempo desde nuestra última victoria en el WRC2", dijo. "Estoy muy orgulloso de lo que hemos conseguido este fin de semana y quiero dar las gracias a todo el equipo. Fue difícil volver al WRC2 y esta victoria es para ellos".
Mikkelsen se mantuvo segundo con su Škoda Fabia Rally2 y sigue liderando el campeonato antes de tener en cuenta los ceros. Con dos abandonos ya esta temporada, la victoria aquí habría sido una gran ayuda en la defensa del título del noruego.
El compatriota de Lefebvre, Yohan Rossel, ha llevado su Citroën a casa 51,0 segundos más atrás y consiguió más puntos sólidos en la tercera posición de la general. El piloto del Fabia también se llevó los primeros puntos en el WRC2 Junior gracias a su valiente pilotaje del domingo.
Un desinflado Grégoire Munster terminó quinto. Lideró el WRC2 Junior durante la mayor parte del rallye, pero cedió el paso a Ingram en el TC17 cuando su Hyundai i20 N sufrió un pinchazo y finalmente terminó a 8,1 segundos.
Vincent Verschueren completó los seis primeros puestos con un Volkswagen Polo, mientras que Armin Kremer se llevó la gloria en la Copa Masters WRC2.
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