El francés de Toyota Gazoo Racing ha ganado su prueba "local" de la serie con un récord de ocho veces y comienza el inicio de la temporada 2022 con el número nueve en su mente.
A pesar de que este año se ha retirado de una temporada completa para disputar pruebas seleccionadas, el gran instinto competitivo de Ogier estará más vivo que nunca.
"Como siempre, es emocionante ir a Montecarlo", comenta Ogier. Soy un competidor y quiero ganar. Siempre trabajo para intentar dar lo mejor de mí en cada prueba y lo haré en Montecarlo".
"No estoy compitiendo en todo el campeonato, así que quizás eso me hace pensar un poco diferente, pero aun así estoy deseando llegar al Monte".
Ogier probó el mes pasado el nuevo Yaris Rally1 que pilotará por primera vez. Quedó inmediatamente impresionado con la potencia híbrida que ofrece el coche fabricado en Finlandia.
"A todos nos gusta la potencia", dijo. "El coche era bueno. Sabemos que hay muchos cambios en este nuevo coche en comparación con la generación anterior. Estoy seguro de que el equipo va a conseguir que este coche evolucione tanto en rendimiento como en fiabilidad".
"En las primeras semanas la fiabilidad puede jugar un papel importante. Estos coches son muy nuevos, se están haciendo grandes progresos en cada prueba. En comparación con la temporada pasada es posible que juegue un papel más importante".
Ogier se enfrenta a una batalla muy emocionantes contra su archienemigo y compañero del Monte, Sébastien Loeb, ya que 11 coches de Rally1 dan paso al nuevo y emocionante futuro sostenible del WRC.
Loeb, que está a una sola victoria de su compatriota en el salón de la fama del Monte con siete victorias, pilotará el Puma Rally1 de M-Sport Ford en la cita con sede en Mónaco.
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